Ayer, al despedir a mi hija en el aeropuerto de Madrid arrastrando una enorme maleta y ella oculta bajo una mochila más grande que su diminuto cuerpo, mientras nos dirigíamos hacia el mostrador de facturación, me dijo: Vale papá, mejor te marchas. Te quedan 300 kmts. hasta casa. Te llamo cuando llegue a París. La di un abrazo y dos besos y me despedí con un Au revoir!
Al salir del aparcamiento, vi como un avión levantaba el vuelo y, ahora si, comprendí que mi golondrina ya volaba sola.
Caricia sobre el oceano
Caricia sobre el oceano,
lleva a un pájaro tan ligero
que vuelve de tierras nevadas.
Aire efímero de invierno,
a lo lejos tu eco se aleja,
castillos en España.
Vira al viento, gira, despliega tus alas
en el alba gris de oriente.
Encuentra un camino en el arcoiris,
llegará la primavera.
Una caricia sobre el océano
deja a un pájaro tan ligero
sobre le piedra de una isla sumergida.
Aire efímero de invierno,
al final tu aliento se aleja,
lejos, en las montañas.
Vira al viento, gira, despliega tus alas
en el alba gris de oriente.
Encuentra un camino en el arcoiris,
llegará la primavera.
Calma sobre el océano...
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